Maravillas seriéfilas: ¡Daemon Black tienes competencia!



"A veces las series pueden formar parte de un momento bonito de tu vida. Hay algunas que se convierten en toda tu infancia, otras te acompañan en tu etapa más rebelde y otras con las que maduras, lloras, ríes, sueñas y te enamoras. Pues aquí os dejo ciertas joyas que toda persona debería ver y admirar al menos una vez en la vida". 
La primera maravilla seriéfila es:




ROSWELL, gira en torno a tres alienígenas adolescentes que están ocultos como humanos en el famoso pueblo de Nuevo México. Los alienígenas son supervivientes del incidente OVNI de Roswell en 1947 y narra la historia de amor entre el extraterrestre Max Evans y la guapa camarera Liz Parker. Roswell está basada en los libros de la escritora Melinda Metz







<< Así terminó nuestra vida en Roswell
¡Qué viaje tan largo y extraño ha sido...!
¿Volveremos alguna vez? 
>>
No lo sé, ni siquiera yo puedo ver lo que va a ocurrir en el futuro... solo sé que soy Liz Parker y que soy feliz >>






Seis años han pasado ya desde que vi esta serie. Por aquel entonces yo sólo era una estudiante de bachillerato preparándose para aprobar la prueba de acceso a la universidad. Un verano demasiado largo para una estudiante rodeada de libros, y no de los que gustarían leer. Y Roswell apareció como de la nada, sin que pensase que me alegraría noches y noches de fastidioso estudio. Tres temporadas y sesenta y un capítulos llenos de sentimientos encontrados. Probablemente una de las mejores series que he tenido el lujazo de ver nunca. 

¿Por qué? 


  • Porque hizo que las noches se volvieran cortas para poder ver todos los capítulos. 
  • Porque sin duda fue LA SERIE.
  • Porque consiguió marcar unas ojeras en mi cara que ni los mismísimos exámenes de trigonometría. 
  • Porque me enamoré perdidamente de Max Evans.
  • Porque el prototipo de chico PERFECTO es un alienígena tímido y retraído colmado de amor. 
  • Porque lloré mucho y también reí lo suyo.

  • Porque cada vez que el actor Jason Behr lloraba, cada minúsculo trocito de mi corazón lloraba con él. ¡Qué perfección de actuaciones, por favor! Cada temporada se superaba a sí misma. Cada personaje maligno te sorprendía para bien, y ¡qué historia más maravillosamente maravillosa de amor!


Tal vez Daemon Black sea el primer alienígena sexy del planeta pero Max Evans será el único que os robe el corazón con tan sólo verlo aparecer. De modo que, si tenéis pensado empezar alguna serie, os animo a que veáis Roswell.

Y sobre todo: porque os regalará la mejor canción de todos los tiempos: 




¡Nos leemos maravillosos!


2 comentarios:

  1. Hola! Habla sam de El blog de sam y me encanto tu reseña, ya tengo ganas de ver esta serie *sobre todo porque un año después no he podido superar a Daemon Black y sus ojos esmeralda*. Te agradecería si te pasaras por mi blog y me dieras tu opinión ya que soy nueva. Besos desde Colombiaxx http://bo0ksam.blogspot.com.co/

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    1. ¡Hola Sam gracias por pasar, por supuesto que te sigo de vuelta! Pues si te gustó la saga Lux y todo el tema de alienígenas te recomiendo que veas la serie Roswell, a mi me encantó *________* (ya me contarás si la empiezas a ver) ¡Muchos besos!

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